Arturo Reyes sigue cosechando éxitos
con su nueva novela “La Goletera”,
una obra muy malagueña, cuyo
personaje principal, es “Trini La Goletera”, una guapa andaluza de origen sencillo y
humilde, criada en el barrio de la Goleta, que "tuvo la suerte de llegar a ser
conocida entre los más influyentes intelectuales de la época", quienes vieron en ella la típica imagen de la mujer malagueña.
Y así nos lo hace saber D. Cristóbal Cuevas en su libro sobre
el escritor malagueño…
“Toda la prensa nacional
se vuelca ahora en alabanzas del novelista, destacando el tributo de admiración
de los mismo escritores, colegas de Reyes, que más fama gozaban en España. Así,
Ricardo León dedicará un extenso
poema al laureado narrador, al que pertenecen estos versos:
“El genio resplandece en
su mirada
desbordante de luz y de
energía,
y tiñe con su luz
arrebolada
los recios trazos de su
tez, tostada
por el ardiente sol de
Andalucía.
Alma de artista, corazón
de atleta,
de fe, de amores y
entusiasmo lleno,
llegó del Arte a la
gloriosa meta,
ciñendo la corona de
poeta
a sus robustas sienes de
agareno.
Sus versos resplandecen
como espadas
escintiladas por el sol;
su prosa
vibra en ondas de luz,
en oleadas
de música y color, en
llamaradas
de genio audaz, de
inspiración radiosa…”
Nota: Ricardo León, retratado por Sorolla en 1917.
El impacto conseguido
por la recién publicada novela puede calificarse, sin miedo a exagerar, de
auténticamente excepcional. Fue leída por los
escritores españoles más representativos, y comentada por los críticos de más
prestigio.
Para muchos, la figura
de Trini se convirtió en la representación por antonomasia de la mujer castiza
malagueña, como si Arturo hubiera retratado la esencia de una estirpe completa
más que la de una hembra individual.
Nota: Monumento a Rubén Darío en el Parque de Málaga.
Al igual que González Anaya, Rubén Darío veía en las mocitas trinitarias o percheleras un
trasunto multiplicado de la protagonista del relato que comentamos:
“La Goletera (sic), la heroína de Arturo Reyes, sale multiplicada de
su barrio, seguida del novio y de los varios Pipirigañas que andan alrededor
suyo. Como no soy muy ducho en distinguir las de la Goleta entre las del
Perchel y de la Trinidad, se me antoja una Trini cada moza de las que llaman
barbianas, con bellos ojos y caras y cuerpos de celeste pecado mortal.
En el paseo, por la
tarde, a orilla del mar quieto y amoroso en su dulce infinito, se juntan todas
esas Trinis en grupos familiares, cerca de las pequeñas hogueras en que en
sartas se asan las ricas sardinas recién salidas del copo, y que se comen
calientes, regadas después con el chispeante Montilla que pone luz solar en la
cabeza y suelta estas ágiles lenguas, estas ágiles manos y estos ágiles pies,
pues siempre se toca la guitarra, siempre se jalea, se acompaña al tocador con
las palmas, siempre se cantan las gimientes malagueñas o los rítmicos tangos, y
a veces se ve a una brava muchacha indicar un paso en que luce el garbo
heredado de las antiguas danzarinas andaluzas.
Las percheleras y las
trinitarias son famosas por su gracia y su habilidad para el canto y el baile.
Así las he admirado al pasar, mientras un sol cariñoso teñía ya de oro, de
violeta, de púrpura, el inmenso cristal mediterráneo.”
Continuará…
BIBLIOGRAFÍA:
- “Arturo Reyes. Su vida
y su obra. Un enfoque humano del andalucismo literario”. Cuevas García,
Cristóbal. Editado por la Caja de Ahorros Provincial de Málaga. Obra Cultural.
C. S. I. C. 1974.
- Archivo familiar Reyes
(ART).
- “La Goletera”. Madrid,
R. Velasco, 1901.
EN LACE RICARDO LEÓN:
ENLACE RUBEN DARÍO:
¡¡¡ Qué bonitooooo !!! Tengo que comprarme el libro, sí o sí.....
ResponderEliminarGracias por darmelo a conocer....
Besos.