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Archivo Arturo y Adolfo Reyes Escritores de Málaga por Mª José Reyes Sánchez se encuentra bajo una Licencia Creative Commons Reconocimiento-NoComercial-SinObraDerivada 3.0 Unported.

domingo, 23 de septiembre de 2012

EL ESCRITOR MALAGUEÑO ARTURO REYES Y EL AYUNTAMIENTO DE MÁLAGA.


Un trabajo rutinario y monótono donde la contabilidad era su principal ocupación, no era el puesto laboral ansiado por Arturo Reyes pero el Ayuntamiento de Málaga le dio la oportunidad que él precisaba para conseguir la estabilidad económica que tanto necesitaba y que le daría la tranquilidad y serenidad suficiente para poder sentarse a escribir sin agobios ni prisas, sin estrecheces ni apreturas… Fue una persona eficiente e íntegra en su trabajo que no se dejó llevar por la codicia...




Nota: Convento de San Agustín (Málaga), antigua ubicación del Ayuntamiento de Málaga.

Su biógrafo, D. Cristóbal Cuevas, nos sigue relatando la vida de nuestro escritor malagueño…

“Desde ahora, una oscura oficina del Ayuntamiento – su hijo Adolfo se referirá a ella calificándola de “covachuela mal alumbrada” – será el escenario donde habrá de transcurrir una buena parte de su vida.

El propio Arturo pintó para siempre el sitio donde trabajaba al describir la oficina de Enrique Cárdenas, el petimetre que interesadamente aspiraba a la mano de Teresita en su novela “Las de Pinto”:

“La  oficina – dice- presentaba un poco riente golpe de vista; la luz que penetraba por los grandes ventanales no conseguían desterrar del todo la sombra que amparábase de los altos y recios muros de la vetusta estantería, abarrotada de empolvadísimos legajos, de las grandes mesas, renegridas por el uso, y de los cien abultadísimos mamotretos.

Empezaban a llegar los empleados como si al cumplir con su deber le dispensaran un alto honor a la Hacienda; abrían los más formales y metódicos sus carpetas y colocaban ordenadamente junto a los libros los útiles del trabajo, mientras los más jóvenes bromeaban en animados corrillos.”

Aquí pasó Arturo Reyes, presa del mortal tedio, las más tensas y anhelantes horas de su madura juventud, y así nos lo recuerda un periodista amigo suyo, impresionado por la sordidez del ambiente en que había de trabajar el autor de tantos cuadros radiantes de luz:

”Aún perdura en mí – decía “Maese Güervo”- la decepción enorme que me produjo la vida normal a que el notable escritor se hallaba encadenado… Alberga el convento de San Agustín las oficinas y dependencias del municipio malagueño. Sus amplias arcadas, sus sombrías bóvedas, aliviaban las molestias de la canícula en aquel clima semitropical.



Nota: Panorámica de la Iglesia - Convento de San Agustín y el Museo Picasso (Málaga).

Cédulas, arbitrios, consumos, cementerios, pasan ante la vista del visitante, en burocrática organización. En el fondo de una galería, la tez  bronceada del poeta recibe de plano el opaco reflejo de los papeles que cubren su mesa de trabajo. No son cuartillas de castiza prosa, son expedientes de despreciable contenido. Y éstos consumen y esquilman la actividad del escritor, que sólo puede dedicar a la literatura las vigilias de su obligación oficial… La tiranía oficinesca le retiene ante un pupitre desde la mañana al atardecer.”

Continuará…

BIBLIOGRAFÍA:
- “Arturo Reyes. Su vida y su obra. Un enfoque humano del andalucismo literario”. Cuevas García, Cristóbal. Editado por la Caja de Ahorros Provincial de Málaga. Obra Cultural. C. S. I. C. 1974.
- Archivo familiar Reyes (ART).

ENLACE CONVENTO SAN AGUSTÍN:
http://malagapedia.wikanda.es/wiki/Convento_de_San_Agust%C3%ADn_(Málaga)

domingo, 16 de septiembre de 2012

EL ESCRITOR MALAGUEÑO ARTURO REYES. (1894 - 1895).


Nos encontramos en Málaga, año 1894, y el escritor Arturo Reyes se encuentra en un momento difícil de su vida. Los problemas económicos son apremiantes y necesita encontrar una salida  para poder seguir haciendo lo que más le gusta, escribir y así poder dar rienda suelta a su inspiración poética. Para ello necesita encontrar un trabajo  estable que le ayude a conseguir sus deseos para lo cual tendrá que mover diferentes hilos como si de un teatro de títeres se tratara…


Nota: Panorámica del Ayuntamiento de Málaga (1975). Autor: Pedro Aguiló Reyes.

De todo ello nos informa D. Cristóbal Cuevas en el libro que escribió sobre la vida y obra de Reyes

“Al avanzar el año 1894, las necesidades siempre crecientes de sus hijos que se hacen mayores, los gastos que le ocasionan sus aficiones literarias, sus viajes y sus relaciones, amén de la sangría subterránea – todo hay que decirlo- que se le va en noches flamencas, vinos y diversiones no siempre baratas, abocan a Reyes a una verdadera bancarrota económica.

Su salud se resiente gravemente repetidas veces, y una desoladora crisis de angustia le atenaza.

“Si miro atrás – escribe a Gonzalo de Castro- [sólo veo] remembranzas negras, si miro al presente nubes tormentosas, si miro al porvenir horizontes sombríos.” (carta de éste, Madrid, 2.I.94;ART) -.

En vista de todo ello , y pese a su instintiva aversión por el trabajo burocrático, decide solicitar un puesto en la Contaduría del Ayuntamiento de Málaga, oficio cuyos rudimentos  conoce gracias a los estudios de idiomas, ciencias, comerciales, etc., realizados en la Academia de Podoski en los lejanos años de su infancia.

Después de varios meses de solicitudes, visitas y recomendaciones – gestiones realizadas mientras digiere la tristeza de la muerte de su hijito menor - (carta de Gonzalo de Castro, Madrid, 4. II. 95) -, obtiene la colocación anhelada, la que constituirá su trabajo definitivo hasta el fin de su existencia.

Con fecha 17 de agosto de 1895, recibe un Oficio del Ayuntamiento en que se comunica textualmente:

”Por acuerdo del Excmo. Ayuntamiento fecha 9 del corriente, ha sido V. nombrado auxiliar de la Contaduría con el haber anual de DOS mil pesetas al año...? Lo digo a V. para su conocimiento e inmediata posesión.”

Arturo que se hallaba ya en situación desesperada se aferra a este cargo como a una auténtica tabla de salvación, e incluso solicita con apremio se adelanten lo más posible las formalidades de su toma de posesión, que al fin tiene lugar el 19 de agosto de ese mismo año.”

Continuará…

BIBLIOGRAFÍA:

- “Arturo Reyes. Su vida y su obra. Un enfoque humano del andalucismo literario”. Cuevas García, Cristóbal. Editado por la Caja de Ahorros Provincial de Málaga. Obra Cultural. C. S. I. C. 1974.
- Archivo familiar Reyes (ART).
- Fotografía de D. Pedro Aguiló Reyes (Barcelona).

sábado, 1 de septiembre de 2012

ARCHIVO REYES: TOD@S CON MÁLAGA


Hoy el blog quiere hacer un alto en el camino y solidarizarse con los afectados por el macro incendio que en los últimos días ha devastado unas 8.500 hectáreas en la zona occidental de nuestra querida provincia de Málaga.



Nota: Fotografía impactante del incendio que ha devastado los parajes naturales de Málaga (Verano 2012).

Imágenes crueles que dañan retinas, noticias que llegan con cuentagotas pero que mantienen a tod@s en vilo. Esta tragedia nos duele en lo más íntimo de nuestro ser y no puede dejar impasible a nadie.

Pueblos emblemáticos por su belleza paisajística y su alto valor ecológico han sido arrasados por la acción del fuego sin que se pudiera frenar este maldito incendio a pesar de los esfuerzos realizados por tod@s.

Coín, Mijas, Marbella, Ojén, Monda y Alhaurín de la Torre…

Todos los efectivos (bomberos, militares, policía, voluntarios, …) trabajando coordinados por una misma causa: intentar salvaguardar a nuestros paisanos y residentes así como nuestros espacios naturales, tod@s maltratados “probablemente por la mano humana”.

La solidaridad demostrada por el pueblo español en general, y por el malagueño en particular en los momentos difíciles, nos demuestra que somos un pueblo comprometido que abre sus puertas y su corazón a todos aquellos que lo necesiten.



El pueblo de Ojén fue desalojado al completo en la madrugada del viernes y allí vive un buen amigo mío, Esteban, al que quiero dedicar hoy esta poesía de mi bisabuelo, ya que ayer vivió en sus propias carnes: miedo y preocupación, inseguridad e impotencia, tristeza, … y seguramente hoy esté intentando volver a la normalidad después de lo todo lo sucedido. 

¡Una noche para olvidar...!

                                  ACUARELA

               Contempla “Esteban” * en silencio
               el riente panorama,
               donde del sol a los rayos
               todo brilla; las cañadas
               que entre los montes serpean
               y las adelfas esmaltan
               con sus tonos purpurinos;
               las cumbres de las montañas
               que los pinares sombrean
               y que aroman las retamas;
               los hondos y los barrancos
               donde sus flores de grana
               abre el granado silvestre;
          la ermita, que en la más alta
               cúspide y entre frondosos
          encinares se destaca
               con sus blanquísimos muros
               y con su cruz que de plata
               del sol al beso parece;
          el firmamento – ensenada
               de cristal y de zafiros,
               en la que lentas resbalan
               en blanco tropel las nubes,
               como góndolas de nácar;
          los lagares medio ocultos
               entre las flotantes ramas
               de los viejos algarrobos
               y entre las floridas pámpanas
              de los añosos parrales;
         los arrieros, que en lánguidas
             perezosas actitudes
             acá y acullá cabalgan
             sobre muslos enjaezados
             con vistosas sobremantas
             y bordadas baticolas;
             y por último, en la vaga
             luminosa lejanía
             como un lago de esmeraldas
             y de zafir, el dormido
        mar, donde en tropel, las barcas
        de pescar tienden sus velas,
            cual tiende el ave sus alas.
            
            (…)
                                                 Arturo Reyes.

(*) He querido hoy cambiar el nombre original “Juan” por el de mi amigo “Esteban”, para así poder dedicárselo. Espero que mi bisabuelo no me lo tenga en cuenta.

Continuará…

BIBLIOGRAFÍA:
- “Arturo Reyes: Sus mejores versos”. (Antología poética). Pról. de José Ortiz de Pinedo, Madrid, “Los Poetas”, año II, nº 28, 1929.