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Archivo Arturo y Adolfo Reyes Escritores de Málaga por Mª José Reyes Sánchez se encuentra bajo una Licencia Creative Commons Reconocimiento-NoComercial-SinObraDerivada 3.0 Unported.

sábado, 30 de julio de 2011

LA COMPAÑÍA TEATRAL GUERRERO- DÍAZ DE MENDOZA (III)

Hoy seguimos escribiendo sobre la historia de María Guerrero y Fernando Díaz de Mendoza ya que pretendemos ser exhaustivos a la hora de darlos a conocer. Ambos fueron tan importantes para la escena española que debemos seguir con sus vidas...




Nota: Fotografía que recuerda una de las visitas del matrimonio Guerrero Díaz de Mendoza a la Academia de Declamación de Málaga.


En muy pocos años la Compañía Guerrero-Díaz de Mendoza se convirtió en la compañía española que más giras realizó por América. Durante la temporada ofrecían unas cien funciones en España y otras tantas en América. Debido a su prestigio muchas ciudades tenían que esperar durante varios años para tener la oportunidad de ver la actuación de la pareja de actores más importantes de su tiempo.

Del matrimonio entre ambos actores nacieron dos vástagos, Fernando, en 1897 y Carlos, en 1898. Ambos estuvieron desde su infancia muy integrados en el mundo de la interpretación y llegaron a tener gran éxito en el teatro. El primogénito, Fernando, debutó en la Compañía María Guerrero el 16 de mayo de 1916, con el estreno de “La leona de Castilla”, del poeta y dramaturgo almeriense Francisco Villaespesa en el Teatro Romea de Murcia.

Fernando Guerrero Díaz de Mendoza, casado en segundas nupcias con su prima hermana, la también actriz Maria  Guerrero López,  mantuvo el nombre de la compañía a la muerte de sus padres, actuando junto a su esposa que adoptó el mismo nombre artístico que su famosa tía: "María Guerrero".




Fue así como los nombres de Fernando Díaz de Mendoza y María Guerrero, encarnados en una segunda generación de intérpretes, siguieron figurando en los carteles teatrales españoles hasta mediada la década de los años cuarenta, cuando el hijo de la actriz y el aristócrata falleció, regresando de una gira por Argentina, en el hundimiento del mercante Monte Gorbea, torpedeado por el buque alemán U-512 en  aguas del Atlántico.

Como anécdota me gustaría comentaros que Fernando (hijo), mantuvo una relación sentimental con Carola Fernán Gómez, fruto de la cual nació quien más tarde sería uno de los actores más notables de España en el siglo XX, Fernando Fernán Gómez, al que nunca reconoció como hijo.


El próximo día finalizaremos la historia de esta saga familiar de grandes artistas publicando sobre la relación que Fernando Fernán Gómez mantuvo con su padre y abuelos...

Continuará…

lunes, 25 de julio de 2011

LA COMPAÑÍA TEATRAL GUERRERO - DÍAZ DE MENDOZA (II)


A principios del siglo XX Fernando Díaz de Mendoza era, en opinión de muchos críticos de revistas especializadas, el mejor actor español de la época. Su trayectoria profesional se vio enriquecida en marzo de 1903 cuando La Gaceta (actual Boletín Oficial del Estado) publicó una Real Orden por la que se le nombraba profesor numerario del Conservatorio de Música y Declamación, destinándole a la Cátedra de Declamación.

En 1904 la pareja Guerrero – Díaz de Mendoza traslada su residencia a un lujoso edificio – hotel de tres pisos. La construcción de esta mansión, diseñada por María Guerrero y dirigida por el arquitecto Pablo Aranda, costó un millón de reales.

Una de las mayores peculiaridades era que en el garaje del edificio se guardaban tres de los primeros automóviles que circularon por las calles de Madrid: un 75 Charron, un 20-30 Renault y un eléctrico Columbia. Catorce personas trabajaban en el servicio y se encontraba regido por una institutriz llamada Miss Hughes.

Los meses en los que el matrimonio vivía en Madrid Fernando Díaz de Mendoza y su esposa llevaban a cabo un meticuloso plan de trabajo. Almorzaban a las 11 de la mañana. Poco después un chofer les llevaba al Teatro Español, donde Díaz de Mendoza daba clases a los alumnos del conservatorio. Una vez finalizadas las clases, los actores ensayaban durante tres o cuatro horas para volver a comer a casa a las seis. Después regresaban al teatro para efectuar la representación y una vez que ésta finalizaba, bien se improvisaba una tertulia en el saloncillo, adonde acudían a charlar con los artistas  destacados y personajes de la sociedad madrileña. Posteriormente regresaban al hotel para dedicar algún tiempo al estudio de sus personajes teatrales. En algunas ocasiones el estudio se alargaba hasta bien entrada la madrugada.


Nota: Esta postal fue enviada por los Hermanos Álvarez Quintero al poeta Arturo Reyes en 1907 (Archivo Reyes).

En 1908 el Ayuntamiento de Madrid rescinde a la Compañía Guerrero – Díaz de Mendoza el contrato de explotación del Teatro Español debido a que los compromisos adquiridos en sus giras por América impedían a los actores atender las obligaciones que tenían adquiridas con la entidad municipal. Díaz de Mendoza también se vió obligado a dimitir en octubre de 1908 de su puesto como profesor en la Cátedra de Declamación del Conservatorio por no poder atenderlo debidamente.

El 20 de marzo de 1908 Fernando Díaz de Mendoza adquiere la propiedad del Teatro de la Princesa, hoy Teatro María Guerrero. Después de una serie de reformas el 27 de noviembre de 1909 tiene lugar la inauguración, en la que la Compañía Guerrero – Díaz de Mendoza, interpreta la obra “María la Brava”.

Los actores trasladan su residencia a un edificio anexo al teatro con el que se comunicaban por el escenario. El Teatro de la Princesa fue propiedad de la familia hasta 1928 cuando, tras la muerte de María Guerrero, lo adquirió el Estado. Desde 1978 es la sede del Centro Dramático Nacional.

Continuará…

miércoles, 20 de julio de 2011

LA COMPAÑÍA TEATRAL GUERRERO - DÍAZ DE MENDOZA (I)

Hoy vamos a adentrarnos a conocer la historia de la compañía teatral que el matrimonio Guerrero – Díaz de Mendoza creó y que obtuvo importantísimos éxitos tanto en España como fuera de nuestro país.
Así continúa la historia…

La pareja, ya consagrada en los escenarios, contrajo matrimonio el 10 de enero de 1896, en la iglesia de la Almudena (Madrid). La ceremonia se realizó con suma modestia, sin ostentación de ningún género. Tanto es así que desde el altar la pareja se dirigió al Teatro Español para ensayar la obra cuya representación preparaban en esos momentos.

Poco tiempo después ambos fundan la Compañía Guerrero – Díaz de Mendoza, que en muy poco tiempo se convierte en la más importante de España.

El 11 de abril de 1897 la compañía terminó la temporada en el Teatro Español, y cuatro días después, los actores se embarcaron desde Barcelona para iniciar su primera gira por América. Tenían previsto interpretar noventa funciones en distintos teatros de Buenos Aires y Montevideo.




El escenario más importante de la gira fue el Teatro Odeón, de Buenos Aires, donde interpretaron dieciséis obras diferentes. Los periódicos argentinos dedicaron calurosos elogios a los actores. La compañía teatral española también triunfó en Montevideo.

La primera gira americana fue en éxito de crítica y de recaudación, lo que abrió el camino para futuras giras en la que tuvieron la oportunidad de actuar en países como Perú, Colombia, Bolivia o Cuba.

Un año después, Guerrero y Díaz de Mendoza llevaron sus montajes escénicos por los principales teatros de Europa, en medio de una exitosa gira artística que extendieron su reputación por París, Milán, Turín, Génova y Roma.

Ambos artistas seguían encumbrando con su buen hacer teatral a algunos autores españoles ya consagrados, como los clásicos de los siglos XVI y XVII y, también consiguieron que empezaran a sonar por toda España, América y Europa los nombres de Jacinto Benavente, los hermanos Álvarez Quintero, Eduardo Marquina y Francisco Villaespesa, entre otros.

El cariño del público argentino hacia los actores españoles llevó a Fernando Díaz de Mendoza y a María Guerrero a construir el teatro más importante de Argentina: el Teatro Cervantes (Buenos Aires), en cuya construcción colaboró el rey Alfonso XIII, siendo inaugurado en el año 1921.

Continuará… 

domingo, 17 de julio de 2011

HOMENAJE AL INSIGNE ACTOR TEATRAL FERNANDO DÍAZ DE MENDOZA

Hoy tengo el gusto de presentaros a uno de los más distinguidos actores teatrales que ha dado nuestro país, Fernando Díaz de Mendoza, que además formó una importantísima compañía teatral con su esposa, la inimitable actriz María Guerrero. Ambos marcaron una época dorada del teatro en nuestro país, y quiero que lo conozcais...


Fernando Díaz de Mendoza y Aguado nació en Murcia, en 1862, y falleció en Vigo (Pontevedra), en 1930. Ha pasado a la historia por ser, en opinión de muchos críticos, el mejor actor español de principios del siglo XX.



De origen aristocrático, Fernando heredó a lo largo de su vida los títulos de VI Marqués de Fontanar, VII Marqués de San Mames y VIII Conde de Balazote y de Lalaing, así también fue nombrado en dos ocasiones “Grande de España”.

Apenas existe información sobre su infancia. En su juventud se convirtió en un personaje muy conocido en los ambientes de la alta sociedad murciana, donde era conocido como Fernando de Montanar, apelativo que recibió por uno de los títulos nobiliarios de su padre que el propio Fernando heredaría varios años más tarde. Durante esa época y debido a su desahogada posición económica, se dedicó a las diversiones propias de su rango (cacerías, bailes, casinos, …).

En la década de 1880 se traslada a Madrid donde entabla contacto con otras familias aristocráticas. Su vida profesional da un giro inesperado cuando la Duquesa de la Torre, Antonia Domínguez Borrell, viuda del General Serrano, recuperó el ánimo, tras el duelo por el fallecimiento de su marido y, envuelta en el ambiente cultural de la época, decide construir un teatro, que sirva de distracción a los aristócratas. El teatro recibió el nombre de su hija, Ventura, y se inauguró el 30 de enero de 1887.

Pese a que el recinto no tenía una gran capacidad las funciones gozaban de tanto éxito que se repetían en numerosas ocasiones. En una de las primeras obras que se escenificaron, se presentó un joven actor que hacía el papel de Cervantes en “El loco de la Guardilla”, obra de Narciso Serra. Este joven era Fernando Díaz de Mendoza que aquel día recibió la primera ovación de su vida.

Tras esta representación se convierte en un actor insustituible. Cada papel que representa recibe innumerables elogios de los asistentes.




El momento cumbre de la ascensión como actor del aristócrata murciano fue la representación de la obra de Tirso de Molina, “El vergonzoso en palacio”, justo antes del final de la primera temporada, con Fernando Díaz de Mendoza y Ventura Serrano en los papeles protagonistas. La actuación del joven fue tan brillante que supuso su consagración como gran figura del Teatro Ventura.

El éxito de la representación les obligó a tener que escenificar la obra, a petición popular en este caso, ante ilustres espectadores como la escritora Emilia Pardo Bazán o el político Emilio Castelar.

Poco después de esta representación se confirmó la relación entre Fernando y Ventura, y tras finalizar la temporada teatral ambos anunciaron su enlace matrimonial.

Tras la muerte de su esposa Ventura Serrano, Fernando Díaz de Mendoza, aprovechando su juventud y buena posición social, gasta su fortuna alegremente pese a los consejos de su administrador, quedando en poco tiempo arruinado.

Su precaria situación económica le obliga a tener que trabajar para vivir. En 1892 realiza varias representaciones en distintos teatros de Madrid. Después se enrola en la compañía del actor y empresario Wenceslao Bueno que trabajaba por provincias. La compañía recorre media España, pero tras la gira se disuelve y Domingo de Mendoza se queda sin trabajo.

En 1893, Ramón Guerrero (padre de María Guerrero, quien tenía en esos momentos una licencia de explotación del Teatro Español, propiedad del Ayuntamiento de Madrid) le ofrece un puesto en su compañía, dirigida por el insigne actor Ricardo Calvo y Revilla.

Continuará…

viernes, 1 de julio de 2011

HOMENAJE A LA GRAN ACTRIZ TEATRAL MARÍA GUERRERO (II)

Este mes de junio ha sido bastante ajetreado con la llegada del veranito, el reencuentro con buenos amigos, las tardes de playa y de ocio, las fiestas, ... 

Todas estas circunstancias  están manteniendo algo ocioso al blog pero no creáis que esto acaba. Al contrario, no ha hecho más que empezar. Yo me marcho de vacaciones y desde el lugar donde pasaré los próximos días me gustaría seguir escribiendo. Espero que pueda ser posible.

Pues bien el blog desea seguir interesándose por la vida de nuestros ilustres artistas teatrales María Guerrero y Fernando Díaz de Mendoza, por la importancia cultural que ambos tuvieron en nuestra ciudad, Málaga y por su vinculación con la Academia de Declamación y su profesorado.

En el último post empezamos a conocer la interesante biografía de nuestra ilustre María Guerrero y hoy continuamos…






Nota: Postal de la actriz teatral María Guerrero.


“En octubre de 1885, con sólo diecisiete años, María Guerrero debutó en Madrid en el Teatro de la Princesa, a las órdenes de Emilio Mario, cuya compañía puso en escena la obra "Sin familia", de Miguel Echegaray. Esta primera actuación oficial de la comedianta fue saludada con aplausos por parte de la crítica y el público, con lo que la joven María comenzó a adquirir un merecido reconocimiento.

En 1890, en el Teatro Español, con tan sólo veintidós años, será la primera actriz en la obra de Tirso de Molina "El vergonzoso en palacio", trabajo con el que demostró su especial valía a la hora de encarnar papeles del teatro clásico español.


En 1891, por una indisposición en la salud, abandona momentáneamente las funciones teatrales y aconsejada por el director teatral Emilio Mario se traslada con sus padres, durante cuatro meses a París, donde amplia su formación dramática al lado de algunas figuras tan destacadas dentro de la escena europea del momento como el actor y director Benoît-Constant Coquelin, y la actriz y dramaturga Sarah Bernhardt, con la que llegó a compartir escenarios. También baraja la posibilidad de ingresar en la Comedia Francesa, pero desiste finalmente.
De regreso en España -1892-, ingresó en la Compañía de Mario y Vico, que ofrecía sus representaciones en el Teatro de la Comedia (Madrid) donde se convierte en primera actriz, estrenando el 15 de marzo, “Realidad”, de Benito Pérez Galdós; el 6 de abril, “Sic vos non vobis”, de Echegaray, y, el 5 de diciembre, “Mariana”, del mismo autor, iniciándose una estrecha amistad entre la artista y el futuro Nobel español.
María Guerrero se convirtió en la artista más querida, incluso al mismo nivel que los más afamados cantantes de ópera y toreros del momento.












En 1894 salió a concurso la explotación del Teatro Español de Madrid, y Ramón Guerrero, a petición de su hija, concurrió a la licitación y se hizo con la administración de dicho coliseo. 







En tanto se llevaban a buen término las reformas pertinentes, el nuevo empresario alquiló el Teatro de la Princesa, cuya dirección dejó en manos de la propia María Guerrero, ahora convertida en responsable máxima de una compañía en la que, además de ella, figuraba el mencionado Ricardo Calvo -como primer actor- y el aristócrata arruinado Fernando Díaz de Mendoza -que asumía los papeles de galán-.

A principios de 1895, se inaugura el Teatro Español, tras la reforma, dando cabida en sus estrenos a los clásicos españoles (Echegaray, Clarín, Galdos…). El 9 de noviembre tiene la artista un éxito clamoroso, interpretando en francés, junto a Sarah Bernhardt (de quien, al parecer, había recibido lecciones años atrás), en la escena final de "La esfinge", de O. Feuillet. 

Continuará…